A sus 83 años, el senador independiente Bernie Sanders sigue siendo una de las voces más críticas del sistema político y económico estadounidense. En una reciente entrevista con CBS News, el veterano legislador no se guardó nada: denunció el avance de Estados Unidos hacia una oligarquía y advirtió que la democracia está en serio peligro.

“Este país se enfrenta hoy a un nivel de peligro sin precedentes, algo que nunca he visto en mi vida. Somos una nación que avanza rápidamente hacia la oligarquía, lo que significa que tenemos un gobierno dirigido por la clase multimillonaria, para la clase multimillonaria”, declaró Sanders, apuntando directamente a Elon Musk y Donald Trump como responsables clave de esta deriva.

El senador por Vermont también expresó su preocupación por el malestar social generalizado, alimentado por la precariedad económica. “El 60% de nuestra gente vive al día. Los medios no hablan de ello. No hablamos lo suficiente de ello aquí en el Congreso”, afirmó, criticando la desconexión entre los políticos y las necesidades reales de la ciudadanía.

Sanders fue más allá y cuestionó incluso la etiqueta de democracia que se le da al sistema estadounidense: “Cuando hablamos de que Estados Unidos es una democracia, deberíamos reformularlo y llamarlo una ‘pseudodemocracia’”, sostuvo.

Acusó tanto a republicanos como a demócratas de estar controlados por intereses multimillonarios. “No se trata solo de Musk y los republicanos; también se trata de los multimillonarios del Partido Demócrata”, advirtió.

Sanders ha emprendido una gira nacional con un mensaje claro: resistir el avance de la oligarquía y recuperar el poder para la clase trabajadora. En sus discursos, ha criticado duramente a líderes de su propio partido y figuras como James Carville, quien sugirió que los demócratas adopten una postura pasiva para evitar confrontaciones.

“El colapso de servicios esenciales como la salud o el cuidado infantil es una muestra del precio de esa pasividad”, recalcó.

¿Una nueva candidatura?

Sobre un posible regreso como candidato presidencial en 2028, Sanders prefirió mantenerse ambiguo: “¡Ya estoy un poco mayor para preocuparme por esas cosas! Pero estoy contento de ser senador estadounidense por Vermont”, dijo entre risas, dejando abierta, aunque remota, la posibilidad.

En un clima político cada vez más polarizado, Bernie Sanders se mantiene firme como uno de los principales referentes de la izquierda progresista, decidido a dar la batalla contra lo que él considera un sistema secuestrado por los ultra-ricos.