El jitomate, originario de América Central y domesticado en México, es un fruto esencial en la cocina mundial, apreciado por su sabor y sus múltiples beneficios para la salud. Instituciones como la Fundación Española del Corazón recomiendan su consumo diario.
En México, el jitomate es un ingrediente fundamental en la gastronomía. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) destaca su sabor ligeramente dulce, ideal para realzar cualquier platillo. El consumo promedio por mexicano es de 13.8 kilogramos al año, en diversas presentaciones.
Las variedades más populares en México son el saladette, cherry, tipo pera y beef. Cada uno aporta características únicas a caldos, salsas, ensaladas y guisos.
El jitomate es rico en vitaminas A y C, cubriendo hasta el 61% de la ingesta diaria recomendada. Su alto contenido de licopeno, un poderoso antioxidante, fortalece el sistema inmunológico y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Recomendaciones de consumo
Crudo:
El Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) recomienda consumirlo crudo para aprovechar al máximo sus nutrientes y minerales.
Ideal para ensaladas, snacks y jugos, especialmente en el desayuno por su bajo contenido calórico y alto contenido de fibra.
Cocido:
La cocción mejora la absorción del licopeno, aunque reduce la vitamina C y los flavonoides.
La British Tomato Growers’ Association sugiere combinar ambas formas para un equilibrio nutricional.
Beneficios adicionales:
Depurativo
Digestivo
Diurético
Antiinflamatorio
Recomendación final:
Consultar a un profesional de la salud para adaptar su consumo a las necesidades individuales y mantener una dieta equilibrada.
El jitomate es un alimento versátil y nutritivo que ofrece una amplia gama de beneficios para la salud. Su consumo regular, en diversas formas, puede contribuir a una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable.