Hoy, el Palacio de Bellas Artes se convierte en el epicentro de un homenaje lleno de emoción y gratitud para despedir a Silvia Pinal, una de las figuras más emblemáticas del cine, teatro y la cultura mexicana. Desde tempranas horas de la mañana, admiradores, amigos y familiares se reunieron para rendir tributo a la actriz que dejó una huella imborrable en la industria del entretenimiento.
El evento, organizado por la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), no solo busca despedir a la actriz, sino también celebrar su legado artístico y la influencia que tuvo en varias generaciones. Silvia Pasquel, hija mayor de la actriz, quien desde 2022 organizó este homenaje, explicó que el evento estaba diseñado para reflejar la esencia y personalidad única de su madre. El recinto fue adornado con gardenias, alcatraces y girasoles, además de los rehiletes que Silvia amaba, añadiendo un toque personal al tributo.
El cortejo fúnebre, que partió a las 9:30 a.m. desde San Jerónimo, recorrió varias calles emblemáticas de la Ciudad de México en una carroza fúnebre Cadillac 1928. Durante su trayecto, cientos de personas se unieron en aplausos y expresiones de cariño, despidiendo a la actriz que se convirtió en un pilar de la cultura nacional. A las 11:00 a.m., el cuerpo de Silvia Pinal llegó al Palacio de Bellas Artes, acompañado por un coro que ambientó el momento con música solemne.
En un emotivo discurso, Sylvia Pasquel agradeció a los asistentes y recordó la grandeza de su madre. "Hoy estamos en el Palacio de Bellas Artes, el recinto más importante para despedir por segunda ocasión", dijo. La familia de la actriz estuvo presente, destacando momentos personales y emotivos, como las palabras de Alejandra Guzmán, quien recordó a su madre como una mujer "grandiosa" y agradeció todo lo que ella les enseñó.
Michelle Salas, bisnieta de Silvia Pinal, también expresó su cariño en un mensaje conmovedor. "Hoy mientras me despido de ella, quiero quedarme con el regalo más grande que me dio: su amor incondicional", comentó, destacando el impacto que la actriz tuvo en su vida. Camila Valero, por su parte, recordó el legado de Silvia Pinal como una inspiración para su carrera y su familia, mientras Stephanie Salas rememoró su infancia junto a su abuela, resaltando el amor y respeto que siempre tuvo por ella.
Finalmente, al ritmo de "Las Golondrinas", el mariachi que solía acompañar los cumpleaños de Silvia Pinal, se retiró el cuerpo de la actriz del Palacio de Bellas Artes, dejando una profunda sensación de nostalgia y gratitud entre los presentes. Su legado vivirá siempre en la memoria colectiva, como una luz que seguirá guiando a las generaciones futuras.