El empresario y magnate tecnológico Elon Musk aseguró que continuará al frente de Tesla como director ejecutivo durante al menos los próximos cinco años, disipando los rumores sobre una posible salida de la compañía debido a su creciente implicación en asuntos gubernamentales de Estados Unidos.

La declaración fue realizada durante una intervención por videollamada en el Foro Económico de Qatar, organizado por Bloomberg, donde un moderador le preguntó directamente si se visualizaba como CEO de Tesla dentro de cinco años. La respuesta de Musk fue clara y concisa: “Sí”.

Esta afirmación llega en un momento crítico para la empresa, que ha enfrentado una caída del 71% en sus ganancias en el primer trimestre de 2025, además de una creciente presión por parte de inversionistas preocupados por la atención dividida de Musk entre sus múltiples proyectos, incluyendo su participación en el gobierno del presidente Donald Trump.

Musk forma parte de la Comisión de Eficiencia Gubernamental (DOGE), impulsada por la administración Trump para implementar recortes presupuestarios y despidos en la estructura federal. Su implicación política ha generado controversia y ha sido señalada como uno de los factores que ha afectado la imagen pública de Tesla, especialmente en mercados internacionales como Europa.

A pesar del entorno desafiante, Musk se mostró firme en su compromiso con Tesla, reafirmando su papel como líder de la compañía de vehículos eléctricos que ha revolucionado la industria automotriz en la última década. Su participación en el foro económico sirvió también para enviar un mensaje de estabilidad a los mercados y a los seguidores de la marca, en medio de las dudas sobre el futuro de la empresa.

Con esta declaración, Musk busca calmar la incertidumbre mientras Tesla se prepara para sortear uno de sus periodos más difíciles en años, tanto en lo económico como en lo reputacional.