Rubén Oseguera González, alias “El Menchito”, hijo de Nemesio Oseguera, líder del Cártel Nueva Generación (CNG), fue condenado este viernes a cadena perpetua en Estados Unidos, tras ser encontrado culpable de tráfico de drogas, uso de armas y actos de violencia relacionados con el narcotráfico.
La jueza Beryl Howell, de la Corte Federal de Distrito de Columbia, dictó la sentencia en un fallo que marca un golpe significativo contra una de las organizaciones criminales más poderosas de México.
Oseguera González fue declarado culpable el 20 de septiembre de 2024 de conspirar para distribuir cocaína y metanfetamina en EE.UU., además de utilizar armas de fuego en actividades de narcotráfico.
Los fiscales también lo señalaron como responsable de ordenar el asesinato de al menos 100 personas y de haber participado personalmente en dos ejecuciones. Además, lo vincularon con el derribo de un helicóptero militar mexicano en 2015, en el que murieron nueve elementos de las fuerzas armadas.
Su captura y extradición a EE.UU. en febrero de 2020 marcaron un golpe estratégico contra el CNG, donde se desempeñaba como segundo al mando, después de su padre.
La sentencia se da a conocer en un momento de creciente tensión entre Estados Unidos y México en torno al narcotráfico. Días antes, el presidente Donald Trump declaró que había llegado el momento de que EE.UU. “libre una guerra contra los cárteles”, a los que considera una amenaza para la seguridad nacional.
El gobierno estadounidense ha intensificado la presión contra organizaciones criminales mexicanas, aumentando sanciones, operativos antidrogas y extradiciones de figuras clave del crimen organizado.
Durante el juicio, la defensa de “El Menchito” solicitó que la sentencia fuera de 40 años de prisión, argumentando que no debía recibir el castigo máximo. Sin embargo, el tribunal rechazó la petición, dictaminando que Oseguera González deberá pasar el resto de su vida en prisión.
Con esta sentencia, Estados Unidos refuerza su postura de tolerancia cero contra líderes del narcotráfico, mientras la violencia del crimen organizado sigue afectando a México y sus relaciones con Washington.