El gobierno de Guatemala ha incrementado su presencia militar en la frontera con México como parte del plan “Cinturón de Fuego”, una estrategia para combatir el crimen organizado en la región. La medida, anunciada el jueves, busca fortalecer la seguridad en los departamentos de San Marcos, Huehuetenango y Petén, zonas clave en el tráfico de drogas y otras actividades ilícitas.
El ministro de Defensa, Henry Sáenz, explicó que el plan incluye un despliegue coordinado de unidades terrestres, aéreas y marítimas para frenar el avance del narcotráfico y el tráfico de armas.
“Diversas brigadas y comandos han sido movilizados a lo largo del límite político internacional, con un enfoque especial en la lucha contra el crimen organizado”, señaló el gobierno en un comunicado.
El despliegue militar responde a una orden directa del presidente Bernardo Arévalo de León, quien busca fortalecer la seguridad en la frontera tras la reciente visita del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, en la que se abordaron temas de seguridad y migración.
Aunque el ministro Sáenz no especificó la cantidad exacta de soldados desplegados, enfatizó que el objetivo es desarticular las rutas del narcotráfico y frenar el tráfico de armas.
“Huehuetenango es uno de los departamentos más impactados por el desplazamiento de personas de México”, agregó el gobierno.
El lunes, un contingente de soldados guatemaltecos, respaldado por vehículos blindados, patrulló zonas cercanas al océano Pacífico para disuadir a los cárteles de la droga.
“La orden que tengo yo como comandante de esta brigada es mantener esa presencia constante, precisamente para crear esa disuasión” a las bandas criminales, declaró el coronel Juan Celis, jefe de patrulla en el municipio de Ocós, en la costa del Pacífico.
La frontera entre Guatemala y México ha sido históricamente una ruta clave para el crimen organizado, con un aumento en el tráfico de drogas, armas y trata de personas.
En julio de 2024, cerca de 600 mexicanos huyeron de sus comunidades en Chiapas hacia Guatemala debido a la violencia generada por los cárteles del narcotráfico.
Durante un patrullaje reciente, soldados guatemaltecos se encontraron con una patrulla militar mexicana en el río Suchiate, la frontera natural entre ambos países. En un gesto de cooperación, ambos ejércitos intercambiaron saludos.
La vocera del Ejército de Guatemala, Ann Marie Argueta, explicó que estos operativos buscan prevenir cualquier amenaza del crimen organizado transnacional:
“Estos patrullajes se realizan para evitar y prevenir que el narcotráfico, la trata de personas, el tráfico de ilícitos y de armas puedan ingresar al territorio nacional”.
Las autoridades guatemaltecas han reiterado su compromiso de mantener una vigilancia constante en la frontera, mientras que el gobierno de México aún no ha emitido una postura oficial sobre el reforzamiento militar en la zona.