El Real Madrid vivió una noche amarga en la UEFA Champions League al caer 1-3 frente al Milan en el Santiago Bernabéu, en lo que fue una inesperada y dolorosa derrota para los de Carlo Ancelotti. La escuadra italiana, a pesar de no atravesar su mejor momento, mostró su garra y expuso las debilidades defensivas del conjunto merengue en su “propio” torneo.
En un inicio vibrante, Malick Thiaw abrió el marcador para el Milan al minuto 12, sorprendiendo a una defensa madridista que no logró contener a su rival. Pese a ello, el brasileño Vinícius Júnior encendió la esperanza para los merengues al convertir un elegante gol de penalti a lo Panenka al minuto 23, empatando el partido y reavivando a la afición blanca. No obstante, Milan se adelantó nuevamente con un gol de Álvaro Morato (39') y selló el marcador con Tijjani Reijnders (73').
El encuentro no estuvo exento de polémica, con un gol de Antonio Rüdiger anulado por fuera de juego en el minuto 82, tras revisión del VAR. Cuando parecía que una remontada madridista era posible, la decisión arbitral terminó por apagar las esperanzas en el Bernabéu.
Con esta segunda derrota en la fase de grupos, el Real Madrid y su afición aún buscan una versión más sólida y confiable del equipo. Mientras tanto, la inesperada caída ante un Milan aguerrido representa un golpe duro, pero lejos de ser definitivo para el club con más trofeos en la historia de la Champions.