Los Alegres del Barranco vuelven al ojo del huracán. La Fiscalía del Estado de Jalisco ha iniciado una nueva investigación penal en su contra, bajo la sospecha de uso de recursos de procedencia ilícita, luego de un concierto ofrecido en marzo pasado en el Auditorio Telmex de Zapopan.
Durante una conferencia de prensa ofrecida este jueves, el vicefiscal Especial Ejecutivo de Investigación Criminal, Alfonso Gutiérrez Santillán, confirmó que el caso se fundamenta en el artículo 310 del Código Penal estatal, el cual contempla sanciones de cinco a quince años de prisión para quienes obtengan beneficios económicos derivados de actividades ilegales.
La fiscalía sostiene que el grupo podría haber generado ganancias estimadas en más de 5.8 millones de pesos interpretando corridos que presuntamente hacen apología del crimen organizado, como “El del Palenque”. En dicha presentación se proyectaron imágenes de figuras del narcotráfico como Joaquín “El Chapo” Guzmán y Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”, lo que ha sido un punto clave en la investigación.
El monto recaudado por el concierto ya fue asegurado e inmovilizado, y se ha dado vista a la Unidad de Extinción de Dominio, que revisará el origen y destino de los fondos.
Ante la polémica, Pavel, vocalista de la agrupación, declaró en una entrevista que ellos no autorizaron la proyección de esas imágenes, responsabilizando al productor del evento. “No estuvimos de acuerdo”, expresó, asegurando que advirtieron del contenido visual no aprobado durante los ensayos. También insistió en que la presentación no tuvo la intención de rendir homenaje a ningún grupo delictivo.
Este evento ya había tenido repercusiones anteriormente, incluyendo la revocación de las visas estadounidenses de los integrantes. La investigación en curso buscará determinar si existe o no responsabilidad penal directa por parte de la agrupación.
Mientras tanto, la polémica pone nuevamente en debate la relación entre el narcocorrido, la cultura popular y la legalidad.