Kim Kardashian está un paso más cerca de cumplir uno de los sueños más personales y sorprendentes de su vida: convertirse en abogada. La empresaria y estrella de televisión, de 44 años, se graduó recientemente de un programa de Derecho en California, culminando un exigente proceso de formación que duró seis años.

Lejos de optar por el camino tradicional, Kardashian eligió el Law Office Study Program, una ruta poco convencional que permite estudiar leyes sin asistir a una facultad, siempre y cuando se haga bajo la supervisión de un abogado o juez con licencia. Este método, legal en algunos estados como California, requiere una disciplina férrea, estudio autodidacta y cientos de horas de práctica supervisada.

La ceremonia de graduación tuvo lugar en un hotel de Beverly Hills y fue un evento íntimo al que asistieron sus familiares y amigos más cercanos. A través de sus redes sociales, Kim compartió momentos del evento, expresando su orgullo por este nuevo logro académico. “Sé que él estaría muy orgulloso de mí”, escribió en referencia a su padre, Robert Kardashian, abogado y recordado por formar parte del equipo legal que defendió a O.J. Simpson.

Aunque ya se graduó, Kim aún debe aprobar el examen estatal de abogacía de California, conocido como el California Bar Exam, uno de los más exigentes de Estados Unidos. En anteriores ocasiones, ha hablado abiertamente sobre lo difícil que ha sido el proceso, pero también sobre su firme compromiso con su meta profesional.

Además de honrar la memoria de su padre, Kim ha manifestado que su motivación también está ligada a su labor en la reforma del sistema de justicia penal, un tema en el que ha trabajado activamente en los últimos años, participando en campañas por la liberación de personas encarceladas injustamente.

Con este paso, Kim Kardashian reafirma su transformación pública, alejándose de su imagen meramente mediática para consolidarse como una figura comprometida con el activismo y la justicia legal.