Este miércoles, el vicepresidente de Estados Unidos, J. D. Vance, anunció que su país ha presentado una propuesta formal de paz a Rusia y Ucrania, la cual implica concesiones territoriales por ambas partes como base para poner fin al conflicto que estalló en 2022.
“Hemos presentado una propuesta muy explícita tanto a rusos como a ucranianos, y ha llegado el momento de que la acepten o de que Estados Unidos se retire de este proceso”, declaró Vance a la prensa desde el aeropuerto de la ciudad india de Agra, tras una visita al Taj Mahal.
La propuesta contempla que cada nación renuncie a partes del territorio actualmente bajo su control, y plantea que las nuevas fronteras se definan en torno a las líneas del frente actuales. “Las líneas actuales, o un lugar cercano a ellas, es donde, en última instancia, creo que se definirán las nuevas fronteras del conflicto”, afirmó el vicepresidente.
Vance defendió el trabajo diplomático realizado por Estados Unidos para comprender las prioridades de ambas naciones involucradas: “Considero que hemos elaborado una propuesta muy justa. Confío en que europeos, rusos y ucranianos lograrán finalmente resolver esta situación”.
Según información publicada por Axios, la propuesta —entregada la semana pasada a funcionarios ucranianos en París— consistiría en el reconocimiento oficial por parte de Estados Unidos de Crimea como territorio ruso, así como la aceptación tácita del control ruso sobre las zonas ocupadas desde 2022. Este documento, de una sola página, fue calificado como la “oferta final” del presidente Donald Trump.
Washington espera una respuesta de Ucrania en las próximas horas. De concretarse, el acuerdo marcaría un giro drástico en la postura internacional sobre el conflicto, en especial en lo relativo a la integridad territorial ucraniana. Mientras tanto, la comunidad internacional se mantiene expectante sobre la reacción de Kiev ante esta propuesta que podría cambiar el rumbo de la guerra.