Malala Yousafzai regresa a su pueblo natal tras 13 años de exilio

Malala Yousafzai regresa a su pueblo natal tras 13 años de exilio

Malala Yousafzai regresa a su pueblo natal tras 13 años de exilio Malala Yousafzai regresa a su pueblo natal tras 13 años de exilio.

La premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, regresó este miércoles a su pueblo natal, Barkana, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, Pakistán, por primera vez desde que fue atacada por los talibanes en 2012.

Malala, quien viajó acompañada de su padre, su marido y su hermano, compartió su emoción en sus redes sociales:

“Fue una gran alegría para mí regresar allí hoy, después de 13 largos años, para estar rodeada de montañas, sumergir mis manos en el río frío y reír con mis amados primos”, escribió en X (antes Twitter).

Debido a los riesgos de seguridad, la visita se mantuvo en completo secreto y las autoridades cerraron el área donde permaneció la activista y su familia.

Durante su estancia, Malala se reunió con familiares cercanos, visitó el cementerio de sus antepasados y recorrió una escuela y una universidad. Cabe recordar que, a través de su organización Fondo Malala, la activista ha impulsado proyectos educativos en la región.

Malala Yousafzai se convirtió en un símbolo mundial del derecho a la educación luego de sobrevivir a un ataque talibán en 2012, cuando tenía solo 15 años.

El ataque ocurrió cuando Malala volvía de la escuela en el valle de Swat, una zona que entonces estaba bajo control de los fundamentalistas, quienes prohibían la educación de las niñas.

Tras recibir un disparo en la cabeza, fue evacuada al Reino Unido, donde recibió tratamiento médico y ha residido desde entonces. Su lucha por la educación la llevó a convertirse en la ganadora más joven del Premio Nobel de la Paz en 2014.

El regreso de Malala a Pakistán ocurre en un contexto de tensión y violencia, tras un reciente ataque insurgente en la ciudad de Bannu, donde murieron 34 personas, incluyendo civiles, soldados e insurgentes.

Sobre esta situación, la activista expresó:
“Rezo por la paz en cada rincón de nuestro hermoso país. Los recientes ataques son desgarradores”.

A pesar de la violencia y los desafíos, el regreso de Malala a su hogar representa un poderoso mensaje de esperanza y resistencia para Pakistán y el mundo.