Este miércoles, el Instituto Nacional Electoral (INE) de México dio un paso crucial hacia la organización de un proceso electoral sin precedentes en la historia del país. A través de la formalización de la instalación de la Comisión Temporal del Proceso Electoral Extraordinario del Poder Judicial de la Federación, el INE se prepara para coordinar las primeras elecciones populares para seleccionar jueces, magistrados y miembros de la Suprema Corte, previstas para junio de 2025.
La Comisión, liderada por el consejero Jorge Montaño Ventura y las consejeras Norma de la Cruz Magaña y Rita Bell López, tendrá el desafío de estructurar un proceso electoral que definirá a los principales actores del sistema judicial mexicano. Este es un mandato derivado de la reforma constitucional promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que busca que los ciudadanos participen directamente en la selección de estos altos funcionarios del Poder Judicial.
Durante la presentación de la comisión, sus integrantes destacaron los retos organizacionales y logísticos que implica la planeación de esta elección histórica, especialmente considerando el breve tiempo disponible para su implementación, tras las múltiples suspensiones y amparos judiciales que retrasaron su inicio. No obstante, Montaño Ventura manifestó su confianza en que el INE contará con la estructura necesaria para garantizar el éxito del proceso.
"Sabemos bien a qué nos enfrentamos, sabemos hacer elecciones y las hacemos bien", aseguró Montaño Ventura. Además, expresó su certeza de que, con el respaldo de las juntas locales y distritales del INE, se podrán sortear los retos logísticos que involucra una elección de esta magnitud.
Por su parte, la consejera Rita Bell López señaló que la organización de esta elección supone un desafío "en términos organizacionales" debido al tiempo limitado para su planeación y a las complejidades inherentes a la naturaleza inédita de los comicios.
Otro de los desafíos señalados por la consejera Norma de la Cruz fue la necesidad de comprender completamente el proceso de selección de jueces y magistrados, que podría implicar un sistema de votación distinto al utilizado en elecciones anteriores. "Nos obliga a pensar un poco fuera del molde que tenemos y que sabemos, nos obliga también a llevar a cabo este nuevo mandato constitucional, donde no solo tenemos que comprenderlo para ejecutarlo, sino también para poder comunicarlo y explicarlo a la ciudadanía", explicó.
La reforma al Poder Judicial, promulgada el 15 de septiembre por el expresidente López Obrador y respaldada por la actual mandataria Claudia Sheinbaum, establece que será el pueblo quien elija a los jueces, magistrados y ministros, lo que ha generado controversia. El Gobierno federal defiende la constitucionalidad de la reforma, argumentando que la elección directa garantizará la independencia del Poder Judicial y fortalecerá la democracia, mientras que los trabajadores del sector y miembros del Poder Judicial denuncian una intromisión del Ejecutivo en la justicia.
El INE, a través de la Comisión Temporal, ha afirmado que estará "a la altura" de las expectativas ciudadanas, prometiendo un proceso electoral transparente, justo y bien organizado. En los próximos meses, se intensificarán los esfuerzos para estructurar este proceso sin precedentes, que marcará un nuevo capítulo en la historia electoral y judicial de México.
Con la vista puesta en 2025, los ojos de la nación estarán sobre la implementación de esta reforma, que redefine la relación entre el poder judicial y el electorado mexicano. Sin lugar a dudas, el éxito de estos comicios podría convertirse en un referente para otras democracias en el mundo.
