El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reveló que 3.9 millones de personas de 65 años o más viven en condiciones de pobreza en México, siendo Guerrero y Chiapas las entidades con mayor incidencia en esta problemática. Durante 2022, el 49.8% de la población de la tercera edad en situación de pobreza se concentró en seis estados, encabezados por el Estado de México, donde más de 520 mil personas adultas mayores enfrentan esta condición. Le siguen Veracruz, Puebla, Oaxaca, Chiapas y Ciudad de México, con cifras que oscilan entre 212 mil y 278 mil personas.
El informe también destaca que la segunda carencia más común entre los adultos mayores es el acceso a servicios de salud, que pasó del 9.7% en 2018 al 29% en 2022, reflejando una preocupante tendencia de desprotección.
Otro aspecto que agrava la situación es la falta de cotización en instituciones de seguridad social. Según datos de 2020, el 62% de las personas mayores de 65 años no ha contribuido al sistema de seguridad social, una brecha que afecta de manera desproporcionada a las mujeres, ya que 8 de cada 10 nunca realizaron aportaciones durante su vida laboral.
En términos de jubilación, el informe indica que el 79% de los adultos mayores inactivos económicamente en 2020 recibía alguna forma de pensión, de los cuales solo el 33.1% contaba con una pensión contributiva. Además, en 2022, el 60.4% de los adultos mayores dependía de programas sociales para obtener ingresos, una cifra significativamente mayor al 49.4% registrado en 2018.
Coneval subraya que las desigualdades en el mercado laboral y los regímenes de pensiones contribuyen a una baja cobertura de seguridad social, especialmente entre las mujeres. De los 121 programas federales de desarrollo social identificados por el organismo en 2023, solo 8 priorizan o atienden directamente a los adultos mayores, mientras que 11 lo hacen de forma indirecta.