La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una advertencia este miércoles sobre los peligros del consumo excesivo de sal en la dieta diaria, en el marco de la Semana Mundial de Sensibilización sobre la Sal 2025. La iniciativa busca promover políticas efectivas y hábitos saludables que contribuyan a la reducción de sodio en la población, especialmente en América Latina.
Según la OPS, el principal impacto en la salud del consumo elevado de sodio es el aumento de la presión arterial, un factor que incrementa significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares, pero también de cáncer gástrico, obesidad, osteoporosis, enfermedad de Ménière y enfermedad renal.
El problema se agrava por la elevada presencia de sodio en alimentos procesados. En muchos países, tres cuartas partes del sodio ingerido proviene de productos ultraprocesados, como salsas, panes, embutidos, quesos, comidas preparadas y galletas.
Recomendaciones clave para reducir el sodio
La OPS compartió una serie de recomendaciones prácticas para disminuir el consumo de sal y prevenir enfermedades asociadas:
• Consumir alimentos frescos y mínimamente procesados.
• Eliminar el salero de la mesa.
• Cocinar con poca o ninguna sal añadida.
• Sazonar con hierbas y especias naturales en lugar de sal.
• Optar por sustitutos bajos en sodio que contengan potasio.
• Limitar el uso de salsas, aderezos y alimentos instantáneos comerciales.
• Elegir productos etiquetados como bajos en sodio.
• Evitar aquellos con advertencias como “alto en sal/sodio”.
Acciones urgentes para gobiernos
La OPS también destacó la necesidad de que los países adopten políticas públicas sólidas, como establecer metas de reducción de sal en productos de consumo frecuente, fomentar etiquetados frontales claros, y promover campañas educativas en hogares, escuelas y lugares de trabajo.
Con estas acciones, la OPS espera contribuir a una disminución en las tasas de enfermedades no transmisibles y a mejorar la calidad de vida en la región. La organización reafirmó su compromiso de proporcionar herramientas técnicas a los gobiernos para impulsar estrategias integrales de salud pública.