El fiscal anticorrupción de Baja California, Javier Salas Espinoza, se encuentra recuperándose de las lesiones sufridas en el atentado ocurrido en la madrugada del 1 de enero en el Barrio Francés de Nueva Orleans, Estados Unidos. Salas, junto con su esposa Ivonne Palma, fueron víctimas del ataque en el que un hombre arrolló a una multitud, dejando un saldo de 15 muertos y decenas de heridos.

A través de sus redes sociales, el funcionario confirmó su participación en este lamentable suceso y expresó sus condolencias a las familias de las víctimas. "Con profunda tristeza expresó mis condolencias a los familiares de quienes perdieron la vida este 1 de enero 2025 en la Boubon St. New Orleans", escribió Salas, quien compartió una imagen desde el hospital donde se le observa con una férula en la pierna.

La fiscal estatal de Baja California, María Elena Andrade Ramírez, confirmó que tanto Salas como su esposa se encuentran estables, recibiendo la atención médica necesaria. Sin embargo, no se han proporcionado mayores detalles sobre la gravedad de sus lesiones.

El ataque de Nueva Orleans ha conmocionado al mundo y ha generado una ola de solidaridad hacia las víctimas y sus familias. Las autoridades estadounidenses han identificado al presunto responsable como Shamsud-Din Bahar Jabbar, un veterano de guerra que, según reportes, tenía vínculos con grupos extremistas.

La Secretaría de Relaciones Exteriores de México confirmó que, además de Salas y su esposa, otros mexicanos resultaron afectados por este trágico suceso. El gobierno mexicano ha estado brindando todo el apoyo necesario a los connacionales afectados, a través del Consulado de México en Nueva Orleans.

Se espera que en los próximos días se conozcan más detalles sobre el estado de salud de Javier Salas y su esposa, así como sobre los planes para su regreso a México. El fiscal anticorrupción ha sido reconocido por su trabajo en la lucha contra la corrupción en Baja California, y su recuperación ha sido seguida de cerca por la sociedad.