Altos costos y falta de becas frenan programas educativos entre México y EU

Altos costos y falta de becas frenan programas educativos entre México y EU

Altos costos y falta de becas frenan programas educativos entre México y EU Altos costos y falta de becas frenan programas educativos entre México y EU.

El alto costo de la educación en Estados Unidos es uno de los mayores desafíos para la creación de programas académicos conjuntos entre México y el país vecino. La investigadora Elena Centeno García, del Instituto de Geología de la UNAM, subrayó que los elevados precios de colegiaturas y servicios educativos limitan la posibilidad de desarrollar programas de doble titulación y obstaculizan la movilidad de estudiantes mexicanos.

Durante su conferencia “Educación sin fronteras: Desafíos y oportunidades en el entorno académico México-Estados Unidos”, realizada en el marco del XV Aniversario de la Dirección General de Cooperación e Internacionalización de la UNAM, Centeno detalló que las universidades estadounidenses muestran resistencia a perder la inscripción de estudiantes por un semestre o año académico, lo que afecta los intercambios de movilidad entrante. Además, la falta de recursos para becas hace complicado que estudiantes mexicanos puedan estudiar en Estados Unidos durante periodos más largos.

La investigadora recordó que antes de los años 70, el costo promedio de una colegiatura universitaria en Estados Unidos era de 5,000 dólares; actualmente, esta cifra se aproxima a los 30,000 dólares, un aumento del 135%. Sin embargo, señaló que también existen oportunidades de colaboración en temas de interés común, como salud, migración, educación y seguridad, los cuales podrían desarrollarse mediante proyectos conjuntos con universidades estadounidenses, especialmente en la zona fronteriza.

Centeno destacó que los programas cortos, conocidos como *study abroad*, que consisten en estancias de una o dos semanas, resultan atractivos para las universidades estadounidenses, y representan una oportunidad para la UNAM. La experta sugirió que estos programas podrían desarrollarse en la Ciudad de México, así como en las sedes de la UNAM cercanas a la frontera (Tucson, San Antonio y Los Ángeles), lo cual abriría oportunidades para proyectos conjuntos y posibles apoyos de gobiernos y empresas interesadas en el *nearshoring*.

Asimismo, la investigadora mencionó que los cursos en línea de la UNAM son altamente valorados en Estados Unidos, y sugirió fortalecer esta modalidad ofreciendo programas en inglés y español que cumplan con equivalencias en créditos, lo cual podría aumentar la participación de estudiantes estadounidenses en cursos de la UNAM. 

En definitiva, Centeno García planteó que aunque existen obstáculos importantes para la cooperación académica entre México y Estados Unidos, las instituciones de ambos países tienen la posibilidad de trabajar en programas innovadores y estratégicos que aprovechen la cercanía y el interés compartido por desarrollar proyectos de enseñanza e investigación.