En Tepatitlán de Morelos, Jalisco, un joven llamado Octavio Becerra forjaba su propio destino entre estudios, beisbol y trabajo en la taquería de su tío. A sus 23 años, Becerra se ha convertido en un prometedor lanzador de los Dodgers de Los Ángeles, una historia que ha capturado la atención de muchos y que es el tema central del documental “93 MPH Tacos”, disponible de forma gratuita en la plataforma de MLB Originals.

Becerra recuerda sus inicios en la taquería, donde alternaba sus tareas entre entregar órdenes a domicilio y picar carne. “Al principio me costó porque me cansaba, pero luego pude manejarlo”, comenta. Su disciplina y capacidad de equilibrar sus responsabilidades le sirvieron cuando firmó con los Dodgers en 2019 a los 18 años, convirtiéndose en el prospecto mejor clasificado de la Liga Mexicana de Beisbol gracias a su impresionante recta de 93 millas por hora.

“Si comparo picar carne con lanzar, ambos requieren que busques una manera de hacer las cosas más fáciles”, explica Becerra, quien ha aplicado esa mentalidad tanto en su trabajo en la taquería como en el béisbol. A pesar de no estar clasificado en el sistema de los Dodgers según MLB Pipeline, comenzó la temporada 2022 con Rancho Cucamonga, donde tuvo un inicio prometedor antes de sufrir una lesión que lo dejó fuera del montículo por el resto del año.

Becerra, que registró un porcentaje de carreras limpias admitidas de 0.79 y ponchó a 11 bateadores en solo seis juegos, está decidido a llegar a las Grandes Ligas. “La taquería me hizo darme cuenta de que no podía simplemente pedir las cosas que quería. Tenía que trabajar por ellas, ganármelas”, dice, reflejando su ética de trabajo.

A pesar de los desafíos que enfrenta, incluido su estatus actual en la lista de lesionados de Rancho Cucamonga, Becerra sigue siendo una fuente de inspiración para su familia y su comunidad, con la firme intención de convertir su sueño en realidad.