Alejandro Cáceres, un experto en ciberseguridad conocido como P4x o _hyp3ri0n, causó un apagón de internet en Corea del Norte desde su hogar en Miami. Según reportó El País, Cáceres no actuó por razones geopolíticas, sino en represalia por un intento previo de espionaje por parte de agentes norcoreanos hacia su seguridad informática.

En enero de 2022, Corea del Norte experimentó una significativa interrupción de sus servicios de internet justo después de realizar pruebas de misiles balísticos. Este apagón, que duró más de siete días, afectó sitios web nacionales y cortó las conexiones del país con el mundo exterior, impactando la comunicación y los servicios digitales en toda la nación.

Cáceres planificó y ejecutó el ataque cibernético utilizando servidores remotos alquilados y programación sofisticada. Su objetivo era la represalia personal, más que una maniobra política, como expresó en una entrevista con Wired poco después del incidente. Tras dos años de anonimato, decidió revelar su identidad y detallar su participación en la interrupción del internet en Corea del Norte. Cáceres, un colombiano-estadounidense con amplia experiencia en ciberseguridad, es dueño de Hyperion Gray, una empresa especializada en soluciones de ciberseguridad.

A pesar de su éxito, Cáceres ha manifestado frustración por los obstáculos burocráticos que enfrentó al intentar colaborar con agencias gubernamentales de EE.UU. tras el incidente. Él aboga por un enfoque más proactivo en defensa cibernética, destacando la necesidad de agilidad y autonomía en la respuesta a amenazas cibernéticas de estados hostiles como Corea del Norte.

Las acciones de Cáceres han generado debates sobre la ética y la eficacia de las represalias cibernéticas en las relaciones internacionales. Si bien su audaz maniobra contra Corea del Norte atrajo atención y apoyo en círculos de ciberseguridad, también subrayó las complejidades y riesgos asociados con tales operaciones.

Mientras continúa defendiendo prácticas robustas de ciberseguridad y respuestas más enérgicas a las amenazas cibernéticas, la historia de Cáceres pone de relieve el paisaje en evolución de la guerra digital y el papel de los individuos en la formación de políticas internacionales de ciberseguridad.