Un total de 215 reclusos se fugaron la noche del lunes de la cárcel de Malir, en la ciudad portuaria de Karachi, al sur de Pakistán, durante una evacuación de emergencia provocada por un sismo, según informaron este martes autoridades locales.
El terremoto, que llevó a la evacuación preventiva de más de 600 internos, generó un ambiente de caos dentro del penal, lo que fue aprovechado por 216 prisioneros para escapar. El jefe del penal, Arshad Shah, confirmó la cifra y explicó que la confusión facilitó la fuga masiva.
Las autoridades desplegaron un amplio operativo de búsqueda, logrando recapturar a más de 80 fugados hasta el momento. Sin embargo, al menos 130 permanecen aún prófugos.
El ministro del Interior de la provincia de Sindh, Ziaul Hasán Lanjar, calificó lo ocurrido como “una de las fugas más graves en años recientes” y aseguró que se llevará a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer si hubo negligencia del personal penitenciario.
“Se adoptarán medidas disciplinarias estrictas contra los que sean considerados responsables”, advirtió Lanjar.
Por su parte, el inspector general de la Policía de Sindh, Ghulam Nabi Memon, visitó la prisión tras el incidente y detalló que muchos de los evadidos estaban detenidos por delitos relacionados con drogas y que algunos presentan problemas de salud mental.
“Suele ser fácil ubicar y recapturar a este tipo de personas”, añadió el funcionario policial.
La cárcel de Malir, una de las más grandes de Pakistán, no había registrado una fuga de esta magnitud en años recientes. Las autoridades continúan con la búsqueda de los reclusos restantes y han reforzado la seguridad en la prisión para evitar nuevos incidentes.