Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) informaron que ya se han detectado casos en Estados Unidos de la variante NB.1-8-1 del virus SARS-CoV-2, recientemente asociada a un incremento de contagios en China.
Los primeros casos fueron identificados a través del sistema de vigilancia instalado en aeropuertos, orientado a pasajeros internacionales, entre finales de marzo y comienzos de abril, según el reporte oficial.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una alerta sanitaria, debido al potencial de propagación de esta variante, la cual presenta mutaciones que podrían aumentar su transmisibilidad.
Ante el creciente interés y preocupación en redes sociales, el doctor Francisco Moreno, médico internista e infectólogo reconocido con el Premio Nacional de Salud 2020, aclaró en una publicación en la plataforma X que no hay motivos para entrar en pánico.
“Los síntomas de NB.1-8-1 se asemejan a los de otras subvariantes de Ómicron”, señaló el especialista, agregando que en la mayoría de los casos se trata de un cuadro respiratorio leve. También explicó que las pruebas diagnósticas actuales siguen siendo efectivas, y que los protocolos clínicos no han cambiado.
Moreno enfatizó que la transmisión sigue siendo aérea, por lo que las medidas preventivas vigentes continúan siendo útiles: uso de mascarilla en lugares cerrados, ventilación adecuada, higiene de manos y evitar aglomeraciones innecesarias.
Usuarios en redes sociales respondieron al mensaje con llamados a la responsabilidad, apoyando la necesidad de reforzar las precauciones sin caer en alarmismo.
Las autoridades sanitarias recomiendan permanecer atentos a los informes oficiales y continuar con las prácticas preventivas ya conocidas, mientras se monitorea el avance de esta nueva variante a nivel mundial.