Una noche destinada a la celebración se convirtió en una escena de horror en Monterrey, Nuevo León. Durante la madrugada del 16 de septiembre, una fiesta mexicana fue interrumpida por una brutal balacera que dejó un saldo de tres personas sin vida y al menos siete heridos.

Los hechos ocurrieron alrededor de la 1:00 de la madrugada en una vivienda ubicada en el cruce de las calles Damián Carmona y Privada Damián Carmona, en la colonia Urdiales. De acuerdo con los primeros reportes, un comando armado irrumpió en la reunión y abrió fuego indiscriminadamente contra los asistentes, sembrando el pánico entre los presentes.

Entre las víctimas mortales y heridos se encuentran tanto adultos como menores de edad. De manera particularmente impactante, dos niños, de 5 y 15 años, resultaron heridos por las balas. Las autoridades locales implementaron un fuerte dispositivo de seguridad en la zona y trasladaron a los heridos a diferentes hospitales de la ciudad, donde se reportan graves.

Testigos presenciales describieron el ataque como una emboscada, ya que los agresores, quienes viajaban en una camioneta, llegaron al lugar con la clara intención de causar el mayor daño posible. Hasta el momento, las autoridades no han revelado la identidad de los fallecidos ni han proporcionado información sobre los posibles motivos del ataque.

Elementos de la Policía de Monterrey y de la Agencia Estatal de Investigaciones se encuentran trabajando en el lugar de los hechos para recabar evidencias y dar con los responsables. Peritos forenses han iniciado las diligencias correspondientes para esclarecer los detalles de este lamentable suceso.

Este trágico evento ha conmocionado a la comunidad de Monterrey y ha generado una ola de indignación entre los ciudadanos. Las autoridades han hecho un llamado a la población a mantener la calma y colaborar con las investigaciones