Laurence Van Wassenhove, una mujer francesa, ha revelado que durante los últimos 20 años ha recibido su salario completo sin tener que trabajar. Sin embargo, lo que podría parecer un trabajo de ensueño, Van Wassenhove lo describe como “muy difícil de soportar”.
A pesar de esta situación, Van Wassenhove está demandando a su empresa, Orange, por acoso y discriminación. La mujer asegura que ha sido excluida de su trabajo, a pesar de padecer graves problemas de salud, como epilepsia y hemiplejía, que contribuyen a su discapacidad.
Además de sus propios problemas de salud, Van Wassenhove es madre de dos hijos, uno de los cuales es autista. A pesar de recibir su salario, afirma que este apenas cubre sus gastos personales y frecuentemente enfrenta el acoso de cobradores de deudas que le exigen desalojar su hogar, según un reporte de *Clarín*.
La situación se originó en 2002 cuando Van Wassenhove solicitó un traslado a otra región de Francia después de que la empresa en la que trabajaba fue adquirida por Orange. Su solicitud fue denegada y fue puesta en una lista de espera. Posteriormente, se le otorgó una licencia por enfermedad y luego se le ofreció la jubilación debido a su discapacidad. No obstante, la empresa continuó considerándola empleada y le pagaba su salario completo sin asignarle ninguna tarea.
Van Wassenhove ha expresado que no trabajar durante 20 años ha afectado su cuerpo y mente. Se siente desperdiciada por estar confinada en su casa, viviendo una vida cotidiana monótona. “Estar en casa, ganar dinero y no trabajar no es un privilegio. Es muy difícil de soportar,” afirmó.
Ahora, Van Wassenhove busca regresar al trabajo, con la esperanza de encontrar realización y propósito en su vida profesional nuevamente.