En una escena que parece sacada de una película cómica, un grupo de ratas protagonizó un insólito atraco en un cajero automático de un banco en el distrito Tinsukia de Assam, India. El cajero, que ya estaba fuera de servicio debido a una avería, albergaba la sorprendente cantidad de 1.200.000 rupias, equivalente a más de 15.000 euros.

Cuando los técnicos llegaron para reparar el cajero el 11 de junio, se encontraron con una escena desoladora: cientos de billetes destrozados y roídos por las ratas. El inusual incidente dejó a todos perplejos y revolucionó las redes sociales.

Aunque no es la forma más convencional de retirar dinero, estas ratas demostraron que la necesidad y la astucia no conocen límites. El banco, por su parte, ha tomado medidas para evitar futuros robos de este tipo, pero la historia quedará como una anécdota curiosa y sorprendente en el mundo financiero.

Los testigos afirman que las ratas actuaron con una precisión sorprendente. Se movían rápidamente, seleccionando billetes de diferentes denominaciones y arrastrándolos hacia sus madrigueras improvisadas. Algunas incluso parecían colaborar, formando una especie de cadena de suministro de efectivo.

El gerente del banco, Rajesh Gupta, expresó su asombro ante la situación. “Nunca habíamos visto algo así”, dijo. Las redes sociales se inundaron de memes y comentarios humorísticos sobre el incidente. Algunos usuarios sugirieron que las ratas merecían una recompensa por su ingenio. Otros bromeaban sobre la posibilidad de entrenar a las ratas para que realizaran transacciones bancarias legítimas.

El banco ha reforzado la seguridad en sus cajeros automáticos y está considerando medidas adicionales, como la instalación de barreras físicas para evitar futuros ataques de roedores. Mientras tanto, los habitantes de Tinsukia han adoptado una actitud más cautelosa al usar los cajeros, mirando a su alrededor en busca de cualquier signo de actividad sospechosa.

Las ratas de Assam han demostrado que la audacia y la inteligencia pueden surgir en los lugares más inesperados. Quizás deberíamos prestar más atención a nuestros amigos peludos y aprender de su capacidad para superar obstáculos de manera creativa.