En redes sociales se hizo viral la historia de una niña que, en su inocencia, quedó atorada en un molde para hacer pasteles. Según dice el canal WGal TV, la madre de la niña tuvo que llamar a los bomberos para que la auxiliaran con su hija.
Erin Meixel, madre de la niña, dijo que llamó al 911 para pedir ayuda de los bomberos ya que su hija, de dos años estaba atrapada en un molde para pasteles con forma de ángel. La madre externó que la niña se confundió y pensó que era un chal.
Según relató la televisora local, los bomberos del Junction Fire Company tuvieron que usar unas tijeras para cortar el molde y así poder sacar la cabeza de la niña Quinnley. Las labores para liberar la cabeza de la niña fueron un éxito y está en perfectas condiciones, indica Milenio.
“Lo usó como un chal alrededor de sus hombros hasta que llegaron los bomberos. Era una soldado. Todavía podía comer y beber mientras tenía esta lata a su alrededor”, dijo la madre a la televisora WGAL.
La madre bromeó después de que liberaron a la menor con la televisora diciendo que los accidentes suelen ocurrir en su familia, recordando que cuando ella era niña sus piernas quedaron atrapadas en una silla de plástico. Informa el imparcial.com