La letra "Ñ" parece ser patrimonio casi exclusivo de la lengua castellana, ya que apareció en la Edad Media coincidiendo con el nacimiento de las lenguas derivadas del latín.
Dado a que en las inscripciones de muchas iglesias, criptas y en manuscritos de la época, la "N" doble de muchas palabras se sustituye por esta nueva letra.
Su símbolo característico es llamado por la mayoría de los autores como tilde, por algunos circunflejo y otros lo denominan virgulilla.
Con información UNAM.mx