Christine Jones, una residente del estado australiano de Nueva Gales del Sur, quedó aterrorizada al detectar una enorme araña que se escondía en la manija de una de las puertas traseras de su auto.

Jones, quien en un principio pensó que se trataba de "una oruga peluda", comentó que notó algo extraño en la sombra de la manija mientras la alcanzaba para abrir la puerta y dejar las compras, pero al mirar más de cerca descubrió que en realidad se trataba de un espeluznante arácnido. Ante la imposibilidad de abrir la puerta trasera, Christine optó por dejar las compras en otro sitio y dejar a la araña en paz. También comentó que antes de ese día llevaba una semana sin utilizar el vehículo.

Impresionada por lo ocurrido, la mujer compartió un par de fotografías de su hallazgo en un grupo de Facebook especializado en la identificación de arañas australianas. De acuerdo a los internautas, el ejemplar podría pertenecer a la especie 'Holconia insignis' ('banded huntsman' en inglés), que habita en los estados de Nueva Gales del Sur y Queensland y que, a pesar de su gran tamaño y amenazante apariencia, es inofensiva para el ser humano.