El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, ha desatado controversia tras sus declaraciones sobre el Rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, donde se ha denunciado la existencia de un crematorio clandestino y la presencia de objetos personales que pertenecerían a personas desaparecidas, presuntamente vinculados con el crimen organizado.

Durante una transmisión en vivo, el senador de Morena puso en duda la veracidad de algunas denuncias y acusó a los medios de comunicación y a la oposición de usar el caso como una estrategia política.

“Otra vez los medios y la derecha montados en la tragedia”, declaró Fernández Noroña.

Diversas organizaciones civiles han señalado que el Rancho Izaguirre funcionaba como un centro de reclutamiento forzado y crematorio clandestino, donde fueron hallados cientos de zapatos, mochilas y otros objetos personales.

El senador cuestionó la vinculación de estos hallazgos con personas desaparecidas: “Hay 200 zapatos ahí, sí, sí, pero ¿quién dice que esos zapatos son de personas desaparecidas?”.

Si bien Fernández Noroña reconoció la gravedad de la denuncia, pidió esperar los resultados de la investigación oficial, que está a cargo de la Fiscalía General del Estado de Jalisco.

“Es hasta este momento responsabilidad de la Fiscalía General del Estado de Jalisco la investigación”, señaló.

El senador reiteró sus críticas a los medios de comunicación, acusándolos de seguir una línea de ataque en su contra.

“Los medios locales, aquí es un asunto nacional, se van con la misma línea (…) se van con la línea del golpeteo”, expresó.

Además, sugirió la posibilidad de un montaje mediático con las imágenes de los objetos encontrados.

“Ahora qué dijo la compañera presidenta, bueno, sí hay una foto de zapatos, ¿y luego? (…) Como si no pudieras hacer un montaje de las cosas”.

Las declaraciones de Fernández Noroña han generado indignación entre colectivos de familiares de desaparecidos, quienes exigen que el caso se investigue con transparencia y se garantice justicia para las víctimas.