Este 15 de septiembre, al menos una treintena de municipios en diversos estados de México han decidido cancelar los festejos patrios debido a la creciente inseguridad. Entre los estados más afectados están Sinaloa, Nuevo León, Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Durango y Guanajuato.

El Gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, informó el jueves la cancelación del Grito de Independencia en su estado tras los recientes hechos de violencia. En Durango, los municipios de San Dimas y Tamazula también suspendieron los festejos debido a la presencia de civiles armados, según el alcalde Héctor Herrera.

En Nuevo León, seis municipios, incluidos Galeana, General Zaragoza y Doctor Coss, anunciaron la suspensión de las celebraciones por motivos de seguridad. Sin embargo, el gobernador Samuel García aseguró que en Monterrey sí se llevarán a cabo las festividades, destacando además la conmemoración de los 200 años de la fundación de la entidad.

Michoacán también enfrenta suspensiones en municipios como Cotija, afectado por la violencia del crimen organizado. En Chiapas, 12 municipios en regiones colindantes con Guatemala y zonas conflictivas como la Sierra Mariscal cancelaron los eventos. 

En Oaxaca, las autoridades de Zapotitlán Palmas, San Martín Itunyoso y La Reforma suspendieron sus celebraciones por temor a represalias y la falta de autoridades constitucionales en algunos municipios.

Por otro lado, en la Ciudad de México, el Gobierno Federal y local desplegarán un amplio operativo de seguridad para las celebraciones patrias en el Zócalo capitalino, con 12,830 policías y múltiples entidades públicas colaborando para garantizar el orden y la seguridad de los asistentes.

Estos hechos subrayan el impacto de la violencia en diversas regiones del país, obligando a muchas comunidades a priorizar la seguridad sobre la tradición en una de las fechas más importantes del calendario nacional.