Christina Onassis: La misteriosa muerte de la mujer más rica del mundo

Christina Onassis: La misteriosa muerte de la mujer más rica del mundo

 Christina Onassis: La misteriosa muerte de la mujer más rica del mundo Christina Onassis: La misteriosa muerte de la mujer más rica del mundo.

El 19 de noviembre de 1988, Christina Onassis fue encontrada muerta en el jacuzzi de su casa en el exclusivo country Tortugas, Argentina. Tenía solo 37 años y una fortuna de 3.000 millones de dólares que heredó de su padre, Aristóteles Onassis. Fue su íntima amiga Marina Dodero quien la encontró, iniciando así una serie de especulaciones y tristezas que han rodeado la vida y la muerte de la heredera.

Christina Onassis vivió una vida de excesos y problemas de salud. Desde muy joven, luchó contra trastornos alimentarios y una profunda depresión. Su dependencia de los ansiolíticos y otros medicamentos, combinada con un consumo desmesurado de Coca-Cola, creó una “bomba de cafeína” en su organismo. Estos factores contribuyeron a su trágico final, diagnosticado como un edema pulmonar.

El amor también fue esquivo para Christina. Su vida amorosa estuvo plagada de fracasos matrimoniales. Primero con Joseph Bolker, un desarrollador inmobiliario; luego con Alexander Andreadis, heredero de una fortuna naviera; más tarde con Sergei Kauzov, un agente marítimo ruso; y finalmente con Thierry Roussel, quien resultó ser el peor de todos al mantener una relación paralela. A pesar de estos desengaños, Christina encontró un respiro de felicidad con el nacimiento de su hija, Athina, en 1985.

A lo largo de su vida, Marina Dodero fue su constante compañera y confidente. Se conocieron a los 16 años en Punta del Este y desde entonces formaron un lazo inseparable. Marina no solo fue su amiga, sino también su ancla en los momentos más difíciles. Compartieron aventuras por el Mediterráneo a bordo del lujoso yate “Christina” y enfrentaron juntas las tragedias familiares que marcaron a Christina, como la muerte de su hermano Alexander y sus padres, Tina y Aristóteles Onassis.

A pesar de su inmensa riqueza, Christina nunca encontró la felicidad. Los medios de comunicación se regodearon en sus tragedias, desde sus problemas de peso hasta sus desastrosas relaciones amorosas. Hoy, su hija Athina, de 35 años, lleva el legado de los Onassis. Aunque ha experimentado sus propias dificultades, incluida la infidelidad de su exmarido, Athina ha logrado forjar su propio camino, compitiendo en eventos ecuestres de alto nivel y disfrutando de una vida relativamente discreta en comparación con la de su madre.