En un esfuerzo por proteger la vida marina y reducir la contaminación plástica, el gobernador republicano Ron DeSantis firmó una nueva ley en Florida que prohíbe el lanzamiento intencional de globos. Esta medida reemplaza una regulación previa que solo prohibía soltar 10 o más globos en un lapso de 24 horas.

La legislatura estatal aprobó el proyecto de ley en marzo con un amplio respaldo bipartidista, recibiendo elogios de diversos grupos ambientalistas, incluido Oceana, cuyo representante en Florida, Hunter Miller, destacó la importancia de la iniciativa para proteger a las especies oceánicas de los riesgos mortales asociados con los desechos plásticos, particularmente los globos.

Según la nueva ley, los niños menores de 7 años están exentos de la prohibición, pero cualquier otra persona que intencionalmente suelte un globo puede enfrentar multas por arrojar basura. Además, la legislación elimina las exenciones para los globos biodegradables, reconociendo su persistente amenaza para la fauna marina.

Los globos, comúnmente liberados en eventos como bodas, funerales, graduaciones y celebraciones, representan una seria amenaza para las especies marinas. Una vez desinflados, pueden ser confundidos por tortugas marinas y otras criaturas marinas con alimentos como medusas, resultando en obstrucciones digestivas fatales o enredos mortales.

Esta medida refleja un paso más en los esfuerzos de Florida por combatir la contaminación plástica, siguiendo iniciativas previas que han enfrentado desafíos legislativos y vetos gubernamentales. La nueva ley responde a la presión creciente de los defensores ambientales para abordar el impacto devastador de los desechos marinos, reiterando la urgencia de proteger los ecosistemas costeros del estado.

La entrada en vigor de esta ley marca un nuevo capítulo en la política ambiental de Florida, enfocándose en la conservación marina y la sostenibilidad ambiental frente a los desafíos globales de la contaminación plástica en los océanos.