¿Qué pasaría si la Tierra dejara de girar?

¿Qué pasaría si la Tierra dejara de girar?

¿Qué pasaría si la Tierra dejara de girar? ¿Qué pasaría si la Tierra dejara de girar? .

Imagina despertarte un día y descubrir que la Tierra ha decidido, de manera unilateral, dejar de girar. Este escenario hipotético, aunque improbable, nos lleva a reflexionar sobre las consecuencias apocalípticas que podría desencadenar. ¿Qué sucedería si el mundo realmente dejara de girar?

Según la primera ley de inercia de Newton, si te encontraras caminando por la playa cuando la Tierra, que gira a 1.674 kilómetros por hora, se detuviera, saldrías literalmente disparado. No importaría dónde aterrizases, la fuerza del impacto probablemente sería letal. Esta situación no sería diferente para árboles, edificios y cualquier objeto no sujeto al suelo.

Curiosamente, si tuvieras un primo en la Antártida, podría tener más posibilidades de sobrevivir, ya que cerca de los polos, el eje de rotación es más pequeño, reduciendo la velocidad de rotación. Sin embargo, la mayoría de los lugares habitados por humanos experimentarían un impacto devastador.

Aunque detener la rotación terrestre de golpe es prácticamente imposible, ¿y si se desacelerara en días o semanas? En este escenario, la duración de un "día" podría extenderse a seis meses, alternando entre luz constante y oscuridad total. Este cambio afectaría drásticamente los ciclos climáticos, quemando cultivos y evaporando agua durante la fase iluminada, seguida de congelamiento y capas de hielo durante la fase oscura.

Además, la disminución de la rotación afectaría la distribución de la radiación solar, generando un segundo gradiente de temperatura lateral y complicando enormemente la predicción del clima. Los vientos intensos resultantes causarían estragos en el "terminador", la línea de sombra entre la luz y la oscuridad.

Aunque estos escenarios suenan apocalípticos, la realidad es que la rotación de la Tierra se está desacelerando muy lentamente debido al frenado de marea causado por la Luna. Aunque cada siglo la rotación se ralentiza en 2,3 milisegundos más, detenerla completamente es altamente improbable. La ciencia nos brinda la tranquilidad de que no hay razones para entrar en pánico por este escenario extremo.