La foto en Twitter se hizo viral por lo curiosa que llegó a ser, pero también resalta la inseguridad en muchas tiendas comerciales.
El robo hormiga es algo común, tanto que una tienda de autoservicio decidió poner fin a los robos agregando sensores antirrobos a quesos que se encontraban en los refrigeradores.
La imagen fue captada por una clienta que la compartió en redes sociales, el hecho parece curioso debido a que estos artefactos son usualmente encontrados en electrodomésticos de alto valor y muy pocas veces se usan para proteger la comida.
Por lo regular las personas que roban dentro de una tienda comercial suelen esconder el producto dentro entre su ropa.
No es la primera vez que se toman medidas que podrían ser catalogadas como extremas para evitar el robo hormiga, esto porque ya que en otros establecimientos han tenido que poner ciertos tipos de rejas en la sección de carnes para proteger los cortes más caros, indica Milenio.