Con apenas 10 años de edad, la australiana Pixie Curtis tiene y gerencia dos negocios. Bueno, es que su vida empresarial comenzó cuando tenía dos años.
En marzo pasado, la niña abrió una línea de juguetes que llamó Pixie's Fidget. En 48 horas había agotando toda la oferta y en un mes ganó más de 200 mil dólares.
La chica pelirroja de Sídney gestiona también el proyecto de accesorios de pelo para niñas Pixie's Bows, que su madre, Roxy Jacenko, lanzó para ella cuando tenía dos años, y que promociona por Instagram, indica RT.
La propia Roxy tiene una compañía de relaciones públicas y una agencia de 'influencers', además de ayudar con proyectos de comercio electrónico a Pixie y su hijo Hunter, de siete años.
Al comentar los negocios de Pixie en declaraciones a news.com.au, la mujer señaló que tiene tanto éxito, que su hija podría jubilarse ya dentro de cinco años.
"Nuestra broma familiar ha sido que yo trabajaré hasta los 100 años y Pixie se habrá jubilado a los 15. Desde luego, sé quién es más inteligente", dijo Jacenko.
Aunque el negocio marcha a toda vela, Jacenko subraya que no tendría ningún problema si Pixie opta por alejarse y dejarlo en un futuro.
"Realmente, todo lo que un padre puede querer es felicidad y buena salud para sus hijos, y yo no soy excepción", dijo al congratularse de que por ahora Pixie "es feliz y está aprendiendo mucho".
De momento, los planes de Pixie incluyen adquirir un lujoso deportivo Lamborghini y una casa junto a la playa, así que, aunque tiene todas las oportunidades para conseguirlo, tendrá que esforzarse más por un rato.
Un experto en comercio minorista estimó en 2018 que Pixie's Bows podría 'representar' tres millones de dólares al año, luego de que la cadena de grandes tiendas Myer aceptara comercializar los productos de la empresa.
La niña se vio en portadas de algunos medios ya en 2014. Tenía por entonces más de 80.000 seguidores en Instagram y se estaba convirtiendo en todo un ícono de la moda.