Pescadores rusos que navegaban por un río de la península de Yamal, en el extremo norte del país, se encontraron con un oso que luchaba en vano por llegar a la orilla.
El animal se encontraba visiblemente cansado y se aferró a la embarcación para salvarse.
Los hombres ayudaron al plantígrado a subir a bordo con ayuda de un salabre de pesca y posteriormente lo soltaron en tierra firme
Con información: el imparcial