Vecinos de Tameside, de Gran Manchester, Inglaterra, fueron testigos de cómo una manada de ratas se meten en sus casas. En cuanto a su tamaño, ellos describen que son tan grandes como un gato. Este problema comenzó a principios de marzo, y aún no pudieron solucionarlo.
Si bien el barrio ya llamó al control de plagas para que den una solución, los propietarios de las viviendas colocaron sus propias trampas y hasta veneno. Pero, a pesar de esto, los roedores regresan igual, por lo que los residentes deben mantener todo cerrado para que no ingresen a sus casas.
Los vecinos también formaron un grupo de Facebook donde comparten sus quejas y experiencias. Una mujer dijo haber llegado a contar hasta ocho ratas en en el jardín de su casa, mientras que otros cuentan que en las calles se pueden ver varios roedores muertos.
Por su parte, el Consejo de Tameside dijo que ya comenzó a trabajar en una solución con un programa de cebado de alcantarillas. Además, les pidió a los residentes que ayuden poniendo sus desechos en lugares seguros, publica The Sun.