El Monasterio de Piedra, ubicado en la localidad de Nuévalos a escasos kilómetros de Calatayud, tiene como cualidad un enorme río cuya agua resuena en los alrededores.
Sin embargo, los árboles son también un elemento esencial para comprender este entorno natural aragonés, tal y como destacan desde el monasterio
En concreto, en el parque-jardín histórico se contabilizan al menos 50 especies de árboles y arbustos autóctonos, lo que lo convierte en un bosque de ribera en un "excelente" estado de conservación.
"La gran diversidad botánica que atesora se debe a que es un biotopo singular llamado de frontera, que se encuentra entre una zona de vegetación de tipo estepario propia del Sistema Ibérico, y una vegetación de fondo de valle mediterráneo propia de ríos como el Jalón, en el que desemboca el río Piedra", señalan fuentes del Monasterio de Piedra.